El banco central sueco se ha unido a la corriente principal de las autoridades financieras internacionales. Riksbank se niega a reconocer el BTC y otros criptoactivos como divisas, argumentando que no alcanzan el rol mínimo atribuido al dinero.
El equipo de Riksbank ha explicado su postura en un tuit publicado esta mañana. El dinero propiamente dicho debe suponer una reserva de valor efectiva, un medio de intercambio y una unidad de mensurable.
Si el dinero puede representar cierto valor, eso significa que su poder adquisitivo debería permanecer relativamente estable. Es decir, debería ser resistente a una alta inflación. Se trata de una prueba que incluso al dólar estadounidense le está costando superar últimamente.
Muchos alcistas del BTC ven este activo como refugio en tiempos de inflación. Sin embargo, los criptoactivos no parece que sean tan efectivos en estos casos. Empieza verse cierta correlación entre las cotizaciones de las criptomonedas y las acciones.
En este sentido, tanto los movimientos de las acciones como de los activos digitales parecen responder a las declaraciones y medidas de la Reserva Federal. Según el banco central sueco:
“El precio del BTC ha experimentado un alto grado de volatilidad, convirtiéndolo en un refugio relativamente pobre”.
También ubican al BTC por debajo del dinero fíat en términos de medio de intercambio. Globalmente, solo un puñado de negocios aceptan pagos directos con Bitcoin. Según Coinmap, suman 29 500 (incluyendo cajeros automáticos), frente a los 60 millones de negocios que aceptan Visa.
En cualquier caso, se esperan cambios a mejor. Un estudio de Visa indica que una cuarta parte de los pequeños negocios de nueve países están planeando adoptar activos digitales como medios de pago este año.
El mes pasado, el Banco de Canadá discutió el supuesto potencial antiinflacionario del BTC. Curiosamente, el país está sufriendo unos niveles históricos de inflación, que los políticos canadienses proponen resolver a través del uso de la divisa de Nakamoto.
Esta dicotomía la vemos en todas partes, especialmente en Estados Unidos y la Unión Europea. La Reserva Federal y el Banco Central Europeo siguen sin definir Bitcoin y otras criptos como dinero. En una entrevista reciente, Ben Bernanke, expresidente de la Reserva Federal, explicó por qué incluso niega que el BTC pueda retener poder adquisitivo en el futuro.