El token de Ripple sigue sufriendo los efectos de la batalla iniciada por la SEC a finales de 2020. La jornada de hoy se presenta nefasta para el XRP con unas pérdidas cercanas al 28% en las últimas 24 horas, desandando el camino recorrido ayer.
La pasada jornada, el token de Ripple llegó a revalorizarse un 15% en la franja diaria, en parte gracias a la publicación de su registro en Wyoming como empresa. Hoy, la decisión tomada por MoneyGram rompiendo las relaciones con Ripple, ha hundido el precio hasta el nivel de los 0.4 USD.
Tras años de colaboración, MoneyGram (una de las compañías de pagos transfronterizos más importantes del mundo) ha decidido cesar su asociación con Ripple debido a la incertidumbre ocasionada por la demanda de la SEC.
La medida de MoneyGram no ha pillado por sorpresa a nadie: la empresa lleva meses distanciándose de Ripple y su cúpula directiva (que también está siendo investigada por la SEC). En diciembre, poco después de hacerse pública la demanda de la SEC, MoneyGram se apresuró a publicar un comunicado donde negaba tajantemente haber usado los servicios de liquidez de la red de Ripple para satisfacer las necesidades de sus clientes.
Asimismo, MoneyGram justifica su ruptura con la empresa dirigida por Garlinghouse debido a las pobres perspectivas financieras para el primer cuatrimestre de 2021. Más allá de las razones económicas que llevan a MoneyGram a romper las relaciones con Ripple, lo cierto es que la demanda de la SEC sigue dejando sin “surferos” a la “onda” del criptomercado.
MoneyGram es la última de las grandes empresas financieras internacionales que decide darle la espalda a Ripple. Ya hemos visto a gigantes del criptoespacio banear el XRP de sus plataformas de intercambio, tales como Coinbase; por no hablar del repudio de firmas de la talla de Grayscale.