Source: El Mundo
Kazajistán sigue convulsionando debido al estallido en las calles tras la subida del precio de los carburantes. Una de las consecuencias de las revueltas ha sido el apagón orquestado de Internet a mediados de semana.
Se trata de una situación que ha despertado el temor de María Muñoz, portavoz de asuntos económicos del partido Ciudadanos en la cámara baja española. Muñoz tuiteó hace un par de días que “las protestas en Kazajistán tienen repercusiones en todo el mundo”.
¿Cómo pueden afectar a nivel mundial las quejas de una población de apenas 19 millones de habitantes? Vale, el número no lo es todo. Tenemos el ejemplo de la recuperación estonia tras la crisis de 2008.
A decir verdad, nadie le ha hecho mucho caso a Estonia. Puede que el impacto de las medidas estonias hayan calado tanto como las islandesas. En fin, volviendo a Kazajistán, el problema es que abarca casi la quinta parte del minado mundial de BTC.
Ahora las cuentas comienzan a salir. Si se cae Internet en Kazajistán, en torno al 18% del minado de Bitcoin a escala global se va al garete. Por supuesto, no son pocos los analistas que ven en las revueltas kazajas una excelente explicación para la caída en picado del precio del BTC.
Efectivamente, la divisa de Nakamoto lleva una semana horrible. Su devaluación en los últimos siete días supera el -13% y la cotización lucha por no caerse del nivel de los 41k USD. Para Muñoz, se trata de una oportunidad para retomar el debate sobre el criptoespacio en España.
La portavoz de Ciudadanos en materia económica propone “que España se posicione como destino seguro de las inversiones en criptomonedas para desarrollar un sector flexible, eficiente y seguro”. La minería parece estar entre sus prioridades.
¿Podría España ocupar el puesto del segundo país que más mina bitcoins en todo el planeta? Los usuarios de Twitter han respondido a esta cuestión de muchas formas, algunas más amables que otras.
Obviando el troleo de los enemigos políticos, encontramos algunas referencias al coste de la electricidad en España. Se trata de un tema que debería hacerle pensar a Muñoz, pero no en materia de activos digitales, sino por qué los españoles no se revelan al estilo kazajo con las facturas abusivas que están cobrando las compañías energéticas.
El usuario Atholom Motovlog lo deja bien claro: “Deja… ya lo que nos faltaba ponernos a minar aquí y la luz se nos va al cielo directamente”. Geraldo, otro usuario descontento con la propuesta, simplemente ha respondido: “Nadie al volante”.
