El ejército ucraniano ha estado recibiendo criptodonaciones desde la invasión rusa. La mayoría se han llevado a cabo a través de organizaciones sin ánimo de lucro. Algunas por valor de varios cientos de miles de dólares.
Finalmente, los activos digitales están cumpliendo la misión que se pensaba antes del estallido del conflicto armado en Ucrania. Las criptos están eludiendo las restricciones económicas impuestas tras la ocupación de las principales ciudades ucranianas.
En 2021, las asociaciones vinculadas al ejército ucraniano recibieron más de 570k dólares en Bitcoin. Se trata de un aumento del 900% respecto a 2020. Si observamos los datos, las donaciones han subido a medida que el conflicto ruso-ucraniano se ha ido recrudeciendo.
El método preferido ha sido el BTC, no solo en base al respaldo de los legisladores ucranianos, sino por su capacidad para saltarse el bloqueo de las autoridades prorrusas (y de las rusas, ahora que Putin controla las principales ciudades del país).
Las donaciones han subido significativamente desde 2014, año en el que comenzaron los roces geopolíticos actuales tras una larga historia de tensiones entre ambos países de la antigua Unión Soviética.
La razón fue la anexión unilateral de Crimea por parte de Rusia, la cual desató una guerra interna en territorio ucraniano. El este del país se llevó la peor parte del conflicto armado, al menos hasta que Putin ordenara la invasión de Ucrania esta semana.
La guerra se ha extendido al resto del territorio ucraniano, despertando el rechazo de muchos actores del criptoespacio. Uno de ellos, Buterin. El cofundador de Ethereum se posicionó claramente en Twitter contra la invasión rusa, calificándola de “crimen contra los ucranianos y los rusos”.
Volviendo al tema de las donaciones, los medios están difundiendo una noticia intrigante. Alguien, no se sabe quién o qué organización, ha destinado unos 80 BTC (unos 3 millones de dólares) a una organización sin ánimo de lucro vinculada al ejército ucraniano.
Esta donación se suma a otros depósitos “desinteresados” por valor de cientos de miles de dólares. Un ejemplo relevante es la donación de 400k dólares en BTC recibida por la ONG Come Back Alive, proveedor de equipamiento militar ucraniano y suministros médicos.
Otra donación significativa ha sido la destinada a Cyber Alliance. Cerca de 100k USD en forma de criptoactivos (Bitcoin y algunas altcoins de gran capitalización) han ido a parar a su cartera desde 2021.