La adopción del BTC como moneda de curso legal en El Salvador ha supuesto un punto de inflexión para las criptomonedas en LATAM. El interés en el criptoespacio sigue aumentando en la región, que podría convertirse en la vanguardia de la normalización de la criptoeconomía.
Al menos, eso podría argumentarse teniendo en cuenta la apuesta de algunos políticos paraguayos por la adopción del BTC, además de las incontables encuestas y estudios realizados en Latinoamérica.
BNamericas ha publicado recientemente uno de estos análisis, concretamente con datos de la población chilena procedentes en su mayoría de las bases de Sherlock Comms. También se ha cruzado información ofrecida por Google.
Los números dicen que casi la mitad de la población chilena está interesada en el criptomercado y el trading con criptomonedas. El problema, como indican los datos es que la inmensa mayoría no dispone del capital necesario para invertir.
Según el estudio, seis de cada diez chilenos aprobarían el uso de criptomonedas como divisas de curso legal si la coyuntura económica del país se debilitara. Por otra parte, un tercio de los chilenos cree que los activos digitales son buenos instrumentos financieros para combatir la inflación.
El contrapunto lo pone la cuarta parte de la población, que reconoce no tener ni idea de lo que supone para la economía la tecnología blockchain y los criptoactivos. Este dato contrasta con el casi 40% de chilenos que asegura conocer el sector y que recurriría a las cripto para diversificar sus inversiones.
Aunque pueda parecer que una parte significativa de la población chilena estaría a favor de legalizar el BTC, lo cierto es que Chile es de los países latinoamericanos menos interesados en el criptoespacio.
También es uno de los países cuya población exigiría un control férreo sobre el sector: tres de cada diez chilenos abogan por un marco regulatorio claro y fuerte. Respecto al año anterior, se ha producido un incremento de varios puntos en este sentido.
El tema de la legislación parece ser una preocupación común en LATAM. Chile comparte datos similares con Argentina, Colombia y México, donde el 34% de la población prefiere que las criptomonedas se adopten bajo la supervisión estricta de los reguladores.
Curiosamente, pese a ser uno de los países de LATAM que más pasan del BTC y que prefieren que se regule al máximo, Chile destaca en la región por su elevado número de proyectos blockchain.