La guerra ruso-ucraniana ha dejado todo el panorama político en punto muerto. Tras casi dos semanas de conflicto armado, se comienzan a recuperar algunas decisiones pendientes. La primera en ponerse sobre la mesa: la regulación de las criptomonedas.
En Europa, Lagarde ha pedido desde el BCE que Bruselas se ponga las pilas para evitar que Putin y sus aliados esquiven las sanciones económicas a través de los activos digitales. De momento, la eurocámara sigue sin darle el visto bueno definitivo a la MiCA.
Estados Unidos Sí Se Apresura
Al otro lado del Atlántico, Biden sí parece estar dispuesto a regular fuertemente y con celeridad el criptomercado. Ha agarrado la orden presidencial que tenía en el cajón antes de la invasión de Ucrania y parece que la firmará esta semana.
Con el texto en la mano, el presidente estadounidense pretende implementar una estrategia de cooperación con el resto de países para asegurar que navegan en la misma dirección. De momento, parece que el principal punto en común es la imposición de sanciones a Rusia.
El “bloque occidental” y sus simpatizantes quieren que Putin, la oligarquía rusa y las comunidades prorrusas que apoyan la guerra sufran las consecuencias económicas de sus actos. Es lo único que pueden hacer (más allá de enviar armas al ejército comandado por Zelenski), ya que la OTAN y los países de la UE han decidido no pisar territorio ucraniano.
¿Puede Rusia Eludir Las sanciones?
Putin y compañía pueden evitar las sanciones de muchas formas. Lo tienen complicado, pero hay soluciones. La cuestión es que se está hablando mucho del uso preferente de los activos digitales para este fin, y algunos especialistas en la materia están desminiténdolo.
A pesar de que el volumen de operaciones con criptos se ha disparado desde finales de febrero, tenemos al CEO de Coinbase y al de Ripple afirmando que es bastante improbable que Rusia pueda eludir las sanciones a través de los criptoactivos.
Según Armstrong, hay demasiados pasos intermedios que pueden rastrearse en el proceso de conversión de cripto a fíat. Garlinghouse destacó la semana pasada que las retiradas de fíat en los exchanges están respaldadas por entidades financieras que podrían perder sus licencias para operar.
Seguramente, el CEO de Kraken opina lo mismo que Garlinghouse y Armstrong, pero no le preocupa en absoluto el tema. Para Powell, el uso de criptos en este conflicto incluye la defensa de la libertad financiera de los individuos.