Coinbase tiene una relación turbulenta con la Administración estadounidense. Por un lado, la SEC le llama la atención; por otro, el gobierno de Biden le paga para usar su software de análisis.
Concretamente, Coinbase recibirá 1.36 millones de dólares a cambio de permitir el acceso a sus herramientas analíticas al Servicio de Inmigración, como ya hizo en su momento con el Servicio Secreto, la Agencia de Control De Drogas o el Departamento del Tesoro.
Este contrato de alquiler es de los acuerdos más relevantes que Coinbase ha cerrado con la Administración de Estados Unidos. Respecto al último acuerdo federal, el importe que recibirá es hasta 50 veces superior.
Los Datos Cotizan Al Alza
No es de extrañar que Coinbase reciba importes cada vez más jugosos. Los datos se venden como bitcoin en frío, sobre todo si el comprador es el Gobierno de los Estados Unidos y no explica para qué los quiere.
Intriga bastante pensar el uso que puede darle el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) al software de análisis de Coinbase (y a los datos que maneja el exchange, por supuesto).
En anteriores ocasiones, el alquiler del otrora software Neutrino (rebautizado como Coinbase Analytics) ha contado con más transparencia. Es el caso del acuerdo con la hacienda estadounidense, que pretendía perseguir la evasión de impuestos.
En realidad, el contrato escondía un propósito más complejo, ya que las autoridades estadounidenses habían señalado a los componentes del equipo del entonces Neutrino como miembros de una organización internacional dedicada al espionaje.
Cuando Es Legal Pagar Para Espiar
Por supuesto, hablar de espionaje es complicado. Si un grupo de personas gestiona o vende información de forma privada, está mal. Si lo hace un organismo público, pagando a una empresa de compraventa de activos, parece que no está tan mal.
Incluso si el comprador de la Administración no aclara para qué quiere espiar a sus propios conciudadanos, parece que no hay nada ilícito en ello. Hay que conformarse con una tímida explicación: combatir el crimen internacional.
Dentro de esta lucha contra los crímenes entre fronteras, las autoridades incluyen la mal llamada inmigración ilegal. Y aquí queda más claro por qué al ICE no le importa soltar cerca de 1.4 millones de dólares para acceder a los datos de millones de estadounidenses.
Es una comisión muy alta por el alquiler de un software de análisis, pero es que Coinbase Analytics es de lo mejorcito que hay. Además, el exchange de Armstrong es un viejo conocido que no se quejará ni soltará prenda respecto al uso de los datos… y si se columpia, ya está la SEC para apretarle las tuercas.